Negacionismo del fracaso del trasvase Tajo-Segura

En el año 2000, el Libro Blanco del Agua hablaba del «deficiente resultado que ha tenido la explotación del ATS, en relación con sus previsiones iniciales» para referirse a que el trasvase Tajo-Segura no funcionaba. El autor del Libro Blanco del Agua ─Francisco Cabezas─ marcó como culpables de la situación a la mala actuación de los gestores del Tajo, a la pertinaz sequía y a la falta de una definición legal de excedentes, eximiendo de responsabilidad a la concepción de la infraestructura. Posteriormente, el autor del Libro Blanco del Agua presume de haber solucionado la situación, gracias a haber metido en vereda al Tajo (limitando los desembalses al Tajo), a tener en cuenta las sequías en la gestión futura «tal y como ya se está haciendo mediante las reglas de explotación recientemente elaboradas» (sic) y a la definición legal de excedentes en el plan del Tajo de 1998. Nada de los daños al Tajo y a su cabecera, que sencillamente se ignoran; lo único deficiente era que los regantes del Trasvase no recibían toda el agua prometida. Con este discurso, el autor consiguió camelarse a la nomenklatura y la opinión pública. Pero parece que la Naturaleza no se leyó el Libro Blanco del Agua y no siguió los preceptos de tan prestigioso autor, siendo la realidad que después del Libro Blanco del Agua el comportamiento del trasvase Tajo-Segura fue más calamitoso.

Lejos de rectificar, con el Memorándum de 2013, del que fue su artífice técnico, continuó con las mismas recetas. Si no habían tenido éxito anteriormente era porque faltaba contundencia en su aplicación. Así, las reglas de explotación pasan a tener rango de Ley, con un derecho de trasvase automático en los niveles 1 y 2; las salidas al Tajo también se limitan por Ley, con los desembalses de referencia; y se desarma la disposición adicional novena de la Ley 52/1980 que encomienda al Plan del Tajo la determinación del carácter excedentario de las aguas. De nuevo, ignorando, minimizando o ridiculizando las necesidades del Tajo. ¿Qué es lo que se ha conseguido con el Memorándum? Acelerar el desastre.

Cualquier cosa antes de reconocer el fracaso del trasvase Tajo-Segura. Se continúan ignorando los daños a la cuenca del Tajo. Sólo se reconoce la falta de agua para los regantes del Trasvase, pero se culpa de nuevo a la pertinaz sequía … cuando la sequía real en la cabecera del Tajo ha empezado con el año hidrológico 2016-2017, que se inició con unas reservas muy bajas. Se niega la realidad antes de reconocer una verdad incómoda. Un comportamiento irracional, sostenido gracias al control del poder y de la opinión. Es el negacionismo.

Un ejemplo de este negacionismo, y de la forma en la que se efectúa la manipulación de la opinión pública, se encuentra en el artículo de opinión «Los viejos trasvasistas nunca mueren» (La Verdad, 10/12/2017), escrito por Manuel Buitrago, redactor de La Verdad y «autor de muchos libros sobre el agua». Se lamenta de que esté calando en «determinados sectores» (no especifica cuales) que Entrepeñas y Buendía están al 9% por el Trasvase y no por la «brutal sequía», cuando «es público y notorio que el canal está cerrado desde mayo». ¿Qué es lo que pretende justificar con esta argumentación? Porque si desde mayo no se han aprobado más trasvases al amparo de las reglas de explotación (aunque sí se han realizado por la vía de la cesión de derechos) es porque los embalses bajaron de los 368 hm³, antes del inicio del grueso de la campaña de riegos en el Tajo; luego han continuado descendiendo para atender los usos de la cuenca del Tajo.

Pero el problema no es lo que ha bajado la cabecera del Tajo este verano, sino que se inició exhausto. Es una obviedad, que si no se hubiera trasvasado agua con anterioridad, Entrepeñas y Buendía hubieran afrontado la sequía con mayores reservas y se hubiera llegado al presente con niveles más altos. El siguiente gráfico lo pone en evidencia (actualización a la fecha del equivalente incluido en la entrada «Del trasvase Tajo-Segura y sus miserias: irrelevancia del maquillaje frente a la sobrexplotación», realizado en el supuesto de que desde enero de 2014 no se hubieran realizado trasvases y el resto de la gestión hubiera sido igual, teniendo en cuenta la diferencia de evaporación):

Así, a pesar de que el periodista de La Verdad lo quiere negar, es evidente la relación el trasvase Tajo-Segura y que en la actualidad Entrepeñas y Buendía estén al 9% de su capacidad. Además, tira de demagogia y de intento de confundir al lamentarse que «se han abonado a este discurso algunas piezas de otras cadenas, sin dar opción al contraste de información y sin echar una miradita a la cuenca del Segura, la más esquelética de Europa». Otra argumentación que es contraria a los principios del Trasvase, pues en teoría se deberían trasvasar sólo excedentes de la cuenca del Tajo, sin necesidad de «echar miraditas» a otras cuencas. Con independencia de lo mejor o peor que pueda estar la cuenca del Segura, la situación del Tajo es mala, consecuencia del Trasvase; otra evidencia de que está siendo un fracaso.

La perorata del redactor no se queda aquí. Se dedica a lanzar varias puyas al MAPAMA. Entre otras, alude a que en «el año 1995 estuvo peor la cabecera del Tajo, y se autorizó un desembalse ‘in extremis’». Otra argumentación difícil de sostener. En sí misma es indicativa del fracaso reiterado del Trasvase, de su insostenibilidad, pues a pesar de que las reglas de explotación iban a evitar que se repitieran estos problemas, en palabras del autor del Libro Blanco del Agua, se vuelve a una muy mala situación que requiere medidas excepcionales. Se asume que lo que se hace una vez como algo excepcional, se tiene que realizar siempre. Mientras se sigue negando que el trasvase Tajo-Segura está siendo un fracaso.

Hay que entender que el artículo es un reto lanzado al MAPAMA, para ver hasta donde llega su apoyo a los regantes, en un esfuerzo coordinado con el lobby. Una ofensiva para continuar forzando al MAPAMA a que ponga más parches a costa del contribuyente y del maltrecho Tajo, mientras se niega que el trasvase Tajo-Segura está siendo un fracaso.

image_pdfimage_print
Valorar

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.