Trasvasar las avenidas del Ebro, ¿solución alternativa al Trasvase Tajo-Segura o tremendo disparate?

En el diario ABC de la Comunidad Valenciana del pasado 16 de diciembre, aparece un artículo titulado «El Ebro desbordado vierte cada día el agua de todos los trasvases de un año del trasvase Tajo-Segura».

Se trata, como cualquier curioso lector habrá podido entender, tras descifrar el galimatías del título, de una afirmación rotunda, sin ningún tipo de justificación razonable, como se acostumbra es estos tiempos. La noticia se limita a exponer unos datos simples sin entrar en el fondo de la cuestión. Así, por ejemplo, se dice que el Ebro estaba vertiendo el día de la noticia 2300 m³ por segundo, lo que equivale en un día a todos los trasvases que se llevan a cabo en un año a través del ATS(*).

Pues bien, antes de seguir adelante, hagamos un alto para hacer unas simples cuentas. Multiplicando los 2300 m³por segundo por los 86 400 segundos que tiene un día, sale un volumen de agua de unos 200 hm³ (millones de m³). Ahora bien, la cuestión radica en explorar cómo se podría transportar ese gran volumen de agua en un día.Porque a ojo de buen cubero, se necesitaría para su transporte un cauce como el del Ebro desbordado (o sea, anegando campos y poblaciones) para llevar toda el agua a otro sitio.

Una alternativa que se podría ocurrir sería la de transportar el agua por una conducción, tubería pongamos por caso. O sea, con una velocidad circulante del líquido de 1 m por segundo, los 2300 m³ por segundo necesitarían una conducción de 2300 m² de sección, que viene a ser de unos 54 m de diámetro (si se aumentase la velocidad circulante del líquido a 2 m/s, el diámetro necesario sería «solo» de unos 38 m). Ustedes se imaginan una monstruosa tubería circular de 54 m de diámetro, atravesando montes y valles, desde cerca de la desembocadura del Ebro hasta Almería (unos 900 km) con sus acueductos, túneles, sifones, almenaras, estaciones de bombeo, caminos de servicio, líneas y centrales eléctricas (todo monstruoso, claro)(**).

Si se optase por conducir el agua de la avenida por preciosos canales semiexagonales a cielo abierto, como muchos tramos del acueducto Tajo-Segura (ATS), el cálculo resulta fácil: si se tiene en cuenta que el ATS actual está proyectado para transportar unos 30 m³ por segundo, para transportar 2300 m³ por segundo serían necesarios unos 77 acueductos Tajo-Segura (acueducto arriba o abajo).

¡Ah!, y todo ello para funcionar exclusivamente pocos días cada equis años, solo los días en los que se produzcan las avenidas, pues como dice el vicepresidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (SCRATS) en el artículo que venimos comentando: “No pedimos agua del Ebro todo el año ni de forma permanente, solo cuando se producen inundaciones como ocurre ahora». ¡Pues sí que estamos buenos! Eso sin contar que se trataría de «llevarse» la avenida/inundación del Ebro al Segura; o sea, inundando el Segura al soltarle de golpe 200 hm³ en un día, y teniendo en cuenta que esa cuenca no cuenta con el cauce de desagüe del Ebro, río varón. Por último, ¿qué decir del fabuloso estudio en el que dicen que se han planteado hasta 17 conexiones entre cuencas con el objeto de resolver el desequilibrio hidráulico peninsular, proponiendo «desviar los excedentes del Ebro hasta el Duero y desde este río a los pantanos de la cabecera del Tajo (Entrepeñas y Buendía) para contar con reservas hídricas de sobra». Lo que de verdad está «de sobra» son estos estudios de «planificción hidrológica» (ojo, hemos escrito planificción y no planificación), pues resulta que ya figuraban en el malhadado Plan Hidrológico Nacional de 1993, siendo ministro Borrell, y que fueron rechazados (quizá con razón) por el mismo partido político que ahora «arma a la oposición con disparates», cayendo de nuevo con contumacia en el trasvase Ebro-Segura. ¡Cuántas vueltas para terminar siempre en vía muerta! Pero, ¿no existen buenos ingenieros en la cuenca del Segura que atajen públicamente estos disparates junto a otros de carácter turrionesco?(***)


(*) En realidad el trasvase medio del Tajo al Segura en sus 40 años de funcionamiento ha sido de unos 300 hm³ anuales en destino, unos 200 hm³anuales para riego y el resto para abastecimiento urbano.

(**) También se han planteado visionarios trasvases de avenidas desde la entrada del Tajo en Portugal (embalse de Cedillo) hasta el Segura, transfiriendo las avenidas de más de 3000 m³/s que se han producido en algunas ocasiones al combinarse las crecidas de los ríos Tajo, Tiétar, Almonte, Salor y Erjas. En este caso, la distancia para conducir el agua desde la frontera portuguesa hasta Entrepeñas-Buendía sería de «solo» 500 km. Valen las demás cifras aberrantes (en su orden de magnitud) expuestas suso.

(***) Recuerdo un libro de un letrado del Ayuntamiento de Murcia que pretendía llevar las aguas de unos ríos a otros orientado solamente por su proximidad geográfica, sin tener en cuenta la dimensión vertical; es decir, prescindiendo de las divisorias de cuenca que, en su libro, eran tan planas como la Mancha, por lo que las aguas podían circular hacia atrás, como en el curioso caso del Guadiana cerca de las Tablas de Daimiel.

image_pdfimage_print
Valorar

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.