Trasvase → Sequía → Urgencia → Desastre

Un pastor estaba guardando su rebaño no lejos del pueblo, y pensó que sería divertido asustar a los vecinos diciendo que los lobos atacaban al rebaño. En consecuencia, empezó a gritar: «¡Que viene el lobo! ¡El lobo!», y cuando llegaron a toda prisa los vecinos, él se rió de sus temores. Repitió la broma varias veces, y los campesinos una y otra vez vieron que habían acudido a la carrera inútilmente.No obstante, un día, vino el lobo realmente y el pastor gritó: «¡Que viene el lobo! ¡El lobo!», lo más fuerte que pudo. La gente del pueblo estaba ya tan acostumbrada a oírlo que nadie le hizo caso ni corrió en su ayuda. Y el lobo, sin encontrar resistencia, pudo comerse todas las ovejas.
Moraleja: A un mentiroso no lo cree nadie ni cuando dice la verdad.

(Fábula de Esopo «El pastor y el lobo» copiada de la web de Immaculada Vilatersana Lluch)

La cabecera del Tajo lleva varios años de sequía declarada a golpe de Real Decreto tras reclamo insistente del lobby trasvasista, a pesar de que las aportaciones de la cabecera del Tajo se encontraban dentro de la normalidad. Ahora, como en la fábula de Esopo, en un año con aportaciones bajas, la llamada a la sequía parece que está perdiendo eco.

Seguir leyendo Trasvase → Sequía → Urgencia → Desastre

image_pdfimage_print
Valorar